Aquello que creíamos perdido — Adi Alsaid.

En colaboración con Roca Editorial.

Aquello que creíamos perdido (Let’s get lost). | Adi Alsaid. | Roca editorial (Harlequin Teen).

349 páginas. | Tapa blanda con solapas. | 16’90.

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Cinco extraños. Innumerables aventuras. Un viaje épico para conseguir perderse. Una novela juvenil contemporánea en la línea de Ciudades de papel de John Green. Cuatro adolescentes de las cuatro puntas de los Estados Unidos tienen una cosa en común: una chica llamada leila. Aterriza en sus vidas con su ridículo coche rojo justo en el momento en que más la necesitan.      Por ejemplo, Hudson, un chico que trabaja en un taller mecánico de una pequeña población, y que está dispuesto a tirar sus sueños por la borda por el amor verdadero. Luego está Bree, una chica que se ha escapado de casa y está dispuesta a vivir a tope cada día, incluso si tiene que robar para ello; Elliot, que cree en los finales felices; y Sonia, que está convencida de que cuando perdió a su novio, con él se fue la capacidad de amar.      Hudson, Bree, Elliot y Sonia encuentran en Leila a una amiga, y cuando esta se va para proseguir su camino, sus vidas cambian para siempre. Sin embargo, durante su viaje, Leila también descubrirá que lo que más necesitas a veces está justo al principio y que, quizá, la única manera de encontrar lo que estás buscando es perderse en el camino.

Libre de spoilers

«Alguien había dibujado un dragón impresionante. ¡JOAN SE ACOSTÓ CON EL CASTOR!, se leía en mayúsculas en lo alto de la pizarra. Y más abajo, en una letra diminuta, como si el autor del mensaje hubiera pretendido que fuera una especie de susurro: has estado sin cesar en mis pensamientos. La letra de una canción de Johnny Cash, un versículo de la Biblia y el dibujo de un pene figuraban entre otras cosas, a lo largo de la pared. Hudson no pudo evitar sonreír ante aquella colección de pensamientos furtivos plasmados en la pizarra. Miró a Leila y vio que ella también sonreía. Tenía las manos entrelazadas detrás, como quien admira una obra de arte.

—¿Ves los tesoros? —preguntó Hudson».

★★★ (3/5)

Leila necesita olvidar todo aquello relacionado con el accidente que le costó la vida de sus padres y, por eso, decide embarcarse en una aventura infinita, recorriendo varios estados de Estados Unidos para llegar a su destino: ver la preciosa e inimaginable aurora boreal en Alaska. Por el camino no va a estar sola puesto que, parando por diferentes lugares a ayudar a gente que cree necesitar, conoce a Hudson, Bree, Elliot y Sonia, donde encuentras unos amigos en los que, en algo más de un día, llegan a adorarse unos a otros; una búsqueda de amor y amistad para asumir la pérdida de todo lo que ha perdido y cumplir nuevos sueños y dejarse llevar por desconocidos.

     Recomendada como al mismo estilo de John Green con Ciudades de papel llega el primer debut literario del americano Adi Alsaid, donde se puede ver claramente cómo el talento de éste tiene mucho potencial y puede dar mucho de sí. En Aquello que creíamos perdido no encontramos nada semejante a la historia nombrada, sino que es totalmente diferente y especial que, sin lugar a dudas, destaca por sí solo gracias a los temas que toca y al gran road trip ante el que estamos.

      Aquello que creíamos perdido, publicado por Roca Editorial, es la primera novela de Adi Alsaid, la cual teje un argumento con sentimiento y diferentes valores añadidos a la lectura que hacen una delicia; quizá no nos encontremos ante el debut más esperado del año, ni al mejor libro que se ha leído nunca pero, aun así, es una grata lectura para pasar el rato, con un ritmo algo desigual y que nos muestra un argumento complejo, atrevido y especial, como si estuviéramos ante una proyección de una película, por las diferentes situaciones que se encuentran y que hacen que el libro sea completamente realista gracias a la cercanía de éstas y a su manera de ser expresadas. Quizá algo que logra destacar y que, sin duda, es lo que hace brillar a esta novela son los personajes: completamente diferentes, con perfiles interiores bien pulidos y trabajados aunque los respectivos al del aspecto flojeen un poco al no ser muy utilizados…; el abanico tan completo y tan fresco de personajes son algo innovador en la historia ya que, de un modo u otro, todos se someten a situaciones que presenta la vida y tan reales que podría pasarle a cualquiera, al igual que la manera en la que se van desenvolviendo y en la que se enfrentan a diferentes sentimientos, como la pérdida, el amor a primera vista, la amistad, la traición, entre otros, que nos harán ponernos en los lugares de éstos aunque no como ellos mismos puesto que es algo difícil de sentirse identificados al estar mal equilibrado la pulidez del personaje, tan sólo habiendo tocado el interior y apenas rozando el exterior.

 

       La manera de narrar y desenvolver todos los conflictos que se crean por Alsaid tiene su mérito porque, resultando completamente única, detallada y entretenida, toca todos los temas de cada personaje con suavidad y sabe cómo actuar en cada ocasión, cómo sorprender; además, creando diálogos frescos y adaptados para las edades de los personajes, consigue llegar gracias a su cercanía, magia, dulzura, metafórica y trabajada narrativa a los lectores y no duda, en ningún momento, en sorprender y calar hondo. A lo respectivo de los paisajes de la obra, siendo ésta un gran road trip, es cierto que tocamos varios lugares de Estados Unidos y que resultarían más cercanos y acogedores si hubieran sido más profundizados y no se hubiese limitado a comentar únicamente algunas cosas para imaginar el escenario con un pequeño esbozo en vez de perfilarlo todo perfectamente.

       Acompañada por una edición sencilla pero bonita, la portada ante la que estamos capta la atención rápidamente porque, aunque no es una obra de arte ni de las mejores creaciones que hay, sí resulta interesante y enigmática, puesto que poco desvela sobre el contenido más que un recorrido con unas palabras con diferentes sentimientos.

      El autor novela Adi Alsaid no pasará desapercibido por el mundo de la literatura porque, con sus tintes realistas en Aquello que creíamos perdido, creando diferentes situaciones con las que podemos sentirnos identificados o podemos haber vivido, como el amor a primera vista, los problemas familiares o querer decir a alguien que quieres pero no saber cómo, las cuales las viven un amplio elenco interesante, diferente entre sí, con perfiles interiores pulidos y exteriores algo desdibujados y con elementos que los hacen especiales; la narrativa del autor no pasa desapercibida puesto que es personal, sutil, algo lenta pero acogedora y entretenida, y la cual va dando paso a un escenario que, si bien es reconocido, apenas está profundizado en esta obra. Amistad, amor, reflexiones, cinco desconocidos y un futuro hilado entre ellos… Aquellos que creíamos perdido no es la típica historia romántica que puede haberse leído ya sino que, en su interior, esconde un tesoro que no se equivocará en hacer sentir y satisfacer a más de uno.

“Completamente diferente a lo que compara la prensa con Ciudades de papel, esta novedad de Roca Editorial, Aquello que creíamos perdido, es una obra atrevida, especial y única que, aunque sí tiene un ritmo algo descompás y aburrido, tiene una historia que merece la pena conocer y dejarse llevar. Adi Alsaid guarda ases bajo las mangas, situaciones arriesgadas y, sobre todo, un significado verdadero del amor a primera vista, de la amistad y de cómo la vida puede ofrecer situaciones inesperadas y a las que, de una manera u otra, se puede ayudar con ayuda de un desconocido o de un amigo verdadero”.