Will Grayson, Will Grayson - John Green y David Levithan.

Agradecimientos a la editorial por el ejemplar.

Will Grayson, Will Grayson ♣ John Green y David Levithan.

Nube de tinta ♣ 331 páginas.

Tapa blanda con solapas ♣ 14’95 €.

    

Will Grayson tiene dos reglas en la vida: callar y no implicarse en nada. Sin embargo, su mejor amigo, Tiny Cooper, está decidido a buscarle novia y a montar su musical autobiográfico: Tiny Dancer.     Muy cerca de él hay otro Will Grayson: un chico melancólico que no tiene nada bueno a lo que agarrarse. Lo único que hace que su vida merezca la pena es su relación online con Isaac, al que nunca ha visto en persona.      Una fría noche de invierno, los dos Will Grayson se cruzarán en una esquina cualquiera de Chicago. Por suerte para ambos, Tiny está decidido a empujarlos hacia la felicidad, el amor y, por supuesto, el musical más fabuloso jamás representado en un instituto.

«Cuando era pequeño, mi padre solía decirme: “Will, puedes elegir a tus amigos, y puedes meterte el dedo en la nariz, pero no puedes meter el dedo en la nariz de tus amigos”».

Dos de los autores que son fenómenos gracias a sus conocidas y realistas historias, John Green —escritor de Bajo la misma estrella, entre otros— y David Levithan —de Cada día y demás— se unen para formar una novela con toques de humor, momentos tiernos y, sobretodo, tiras de originalidad que la envuelven. El argumento destacado y de género LGBT —género Lesbiana Gay Bisexual Transexual— reúne a un elenco de personajes con los que lograremos identificarnos, reír y desesperarnos; con unos pensamientos reflexivos, tiernos y divertidos, ambos protagonistas nos narrarán la historia de una manera directa, sin rodeos, en un entorno del que apenas se nos aporta la suficiente información, pero en el que nos sentimos cómodos y sumergidos.

Con las ideas claras, con un argumento algo bizarro pero comprensible conforme se pasan las páginas y con momentos en los que la risa es la protagonista y los tiernos aparecen poco después, como si de una montaña rusa se tratara; así es Will Grayson, Will Grayson, lo nuevo que podemos encontrar en librerías de estos autores tan famosos. He de destacar ciertas cosas en la historia, y es que sí me ha gustado, aunque he visto errores hacia el final, como que resultara éste algo precipitado y que, por ejemplo, tardara en engancharme y de meterme de lleno con algunos de los personajes, ya que no me habían terminado de convencer todos en un principio; pero aun así, he de recomendarla porque, simplemente, es maravillosa y mágica.

Sin duda, algo que sobresale en los personajes son ambos protagonistas, que a pesar de tener nombres semejantes son diferentes entre sí, y debido a esto conseguimos ver diferentes puntos de vista que pueden llegar a convencernos. Sí he de decir que el Grayson que nos presenta Levithan es con el que más complicidad he sentido y más cercano he visto, no quita que el resto del elenco no me haya gustado, porque pese a haberme costado encontrarles un lugar por donde pillarles, con el paso de las páginas les vamos cogiendo cariño y acaban convenciéndonos —pero lo dicho, unos más que otros— con sus diferentes comportamientos: sensibilidad, andarse sin rodeos, timidez, creatividad, soledad… sin duda, aquéllos que forman  parte de Green son más alegres, y por el contrario, los de Levithan suelen ser más cerrados.

 

La narrativa sencilla y directa que nos encontramos en la lectura es algo que consigue que las páginas pasen velozmente, con todos los datos en nuestra mente, convirtiéndose así en una lectura que devoramos en un santiamén. Aunque sí tenga un exceso de diálogos, éstos se hacen refrescantes y adictos, por lo que no causan ningún problema; aun así, sí encontramos narración, que aunque no es muy detallada ya que está narrada desde el punto de vista de un personaje y apenas puede dar muchos detalles de algo que él no sabe, sí logramos tener algo de información que nos basta para entender todo.

Poco nos sirve saber cómo es el ambiente, ya que apenas se explayan los autores para darnos detalles de los lugares que nos vamos encontrando conforme la historia avanza; aunque no den la demasiada, sí nos aportan la suficiente para saber algo acerca de ellos y que no nos quedemos sin saber nada, por muy irrelevante que sea el dato —como el nombre de un local, o cómo está el escenario, por ejemplo—. Con la poca información que se nos aporta sobre ellos, como acabo de nombrar, conseguimos sumergirnos en el escenario, aunque nos cueste descubrir algunos datos y sea a través de nosotros quien vayamos construyendo, por decirlo de alguna manera, el paisaje.

                                                                                                             

Desde el inicio quedamos atrapados en las páginas de Will Grayson, Will Grayson por los diferentes sucesos que van a desencadenarse y que formarán una historia peculiar; aunque se vayan resolviendo poco a poco y haya algún que otro giro de guion que no esperamos, vamos encontrando cada vez más. Llegando al desenlace, nos encontramos con un desarrollo rápido pero que logra dejarnos con ganas de más, con el gusanillo de «y qué pasará ahora…»; con varias sorpresas que harán crear un desenlace tierno, maravilloso, mágico y diferente, quedaremos maravillados con esta lectura que, sin duda, resalta entre todas las estanterías.

Sin duda, Will Grayson, Will Grayson es una historia única y encantadora que me ha atrapado de principio a fin. Con un argumento original y bien creado conocemos a un elenco de personajes algo desdibujados pero que acaban marcando gracias a los pensamientos de los dos protagonistas, situados en un ambiente que conocemos con pocos datos y en el que nos adentramos de lleno, diferentes entre sí pero que, aun así, consiguen maravillarnos ambos por distintas partes con sus reflexiones y actos directos. Una lectura recomendable para aquellos que busquen algo fresco y del género LGBT que quiera atraparle.

“Los grandes valores que aprendemos con Will Grayson, Will Grayson es que necesitamos autoestima, que todo puede cambiar en un instante, que no todo tiene que ser cierto ni perfecto y, que por muchas situaciones malas que pase una amistad, ésta siempre va a acabar brillando; y así lo demuestran Tiny y Will Grayson, dos de nuestros personajes”.