jueves, 19 de febrero de 2015

El teorema Katherine - John Green.


Agradecimientos a Boolino por el ejemplar.
El teorema Katherine John Green.
Nube de tinta 297 páginas.
Tapa blanda con solapas 14’95 €.

Según Colin Singleton existen dos tipos de persona: los que dejan y los que son dejados. Él, sin duda, pertenece al segundo. Su última ex, Katherine XIX, no es una reina, sino la Katherine número diecinueve, que le ha roto el corazón. Para escapar de su mal de amores, y con el propósito de hallar un teorema que explique la maldición de las Katherine, Colin emprende junto a su amigo Hassan una aventura que le llevará a Gutshot, un pueblecito de Tennessee, y a la sospecha de que en la vida la inteligencia no siempre es la mejor compañera de viaje.

«A la mañana siguiente de que se graduara en el instituto y por decimonovena vez lo dejara una chica llamada Katherine, el famoso niño prodigio Colin Singleton se dio un baño».

El teorema Katherine es la segunda novela publicada por John Green, en el orden cronológico que empezó desde la publicación de su primera novela; son historias diferentes entre sí, cada una narrando un tema diferente que logra atrapar entre las páginas. En este caso, se nos presenta una historia simple y algo monótona con una narrativa simple y algo aburrida, un elenco de personajes algo desdibujados y una ambientación poco convincente.

John Green nos vende este libro como si de un roadtrip se tratara, pero apenas podemos apreciarlo, ya que no nos adentramos en todo momento en un ambiente de carretera, semejante todo el rato y sin nada destacable; por lo que, en mi opinión, la obra resta unos pocos puntos debido a haber sido vendido de esta manera. Aun así, la historia que nos encontramos no demuestra dificultad al haber sido escrita, ya que es sumamente sencilla y siempre nos encontramos con los mismos personajes, situaciones parecidas y momentos matemáticos o flashbacks que nos resultará algo pesados monótonos, ya que estos últimos suelen repetirse bastante.

En la historia, la sencilla y humorística narrativa del autor resalta; sí es cierto que se nos podrá presentar un estilo más diferente, haciéndose algo repetitivo y cansado —aunque, desde mi punto de vista, nos sucede lo ya dicho porque no está narrado por el protagonista, el cual nos podría transmitir más cercanía—. Una mezcla de diálogos divertidos, amenazantes, curiosos y aturdidos, con una descripción sin demasiada carga y con poca fluidez.

Al no estar narrada desde el punto de vista del protagonista, en mi opinión, los personajes se nos presentan desdibujados, sin los suficientes datos que pudieran evitar una confusión y apenas algo cercanos. Aunque sí es cierto que en el elenco alguno destaca por ser más protagonista y estar más en el centro de atención, aun así no consigue captar nuestra atención y hacernos sentir algo hacia ellos, tan solo un sentimiento pequeño de decepción.

Los escenarios que John Green describe apenas tienen demasiado detalle, por lo que, aunque podamos sumergirnos en él e imaginarnos bien la historia, como si estuviésemos dentro, éstas se ven algo vacías.
                                                                                                             
El inicio que guarda El teorema Katherine entre sus páginas nos adentra poco a poco en la aventura que está a punto de desencadenarse: datos irrelevantes, otros divertidos, números volados que resultan sobrecargados y que apenas son interesantes… aun así, la historia mantiene un ritmo constante. Aunque a mitad del libro el ritmo decae debido a la poca aparición de nuevos sucesos interesantes y de repetirse siempre lo mismo, vamos llegando a un final en el que acabaremos satisfechos pese a saber de antelación qué sucedería.

El segundo libro de John Green, El teorema Katherine, no es ni de lejos el mejor de todos: tienen un ritmo pausado, una historia sencilla y monótona, una narrativa algo pesada, unos personajes desdibujados, una ambientación con falta de algo que la complete. Una lectura recomendable para los amantes de las matemáticas, de las historias raras pero con toques de humor y con las que se aprende en cada página algo nuevo, sea de un personaje famoso o de un idioma.

“John Green nos logra confundir con el gran teorema que el protagonista debe de resolver, el cual se entremezcla con palabras sencillas y que es protagonista de una historia simple”.


5 comentarios:

  1. Todavía no me he leído este libro pero le tengo unas ganas terribles!!! A ver si dentro de poco me pongo con él:)

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  2. Pues a mí este libro me encantó, me gustó muuucho más que Ciudades de papel y me reí muchísimo. Supongo que para gustos los colores.

    Un beso. ♥

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  3. ¡Hola! Yo no sé si se debió a que era el cuarto que leía de John Green y se me hizo pesado porque todos son parecidos, o a lo que tú dices, que es monótono. Es una pena, porque su manera de escribir es muy buena. El principal problema que yo le encuentro es que Lindsey, Alaska y Margo son iguales. Lo mismo podríamos decir de Miles, Quentin y Colin y de Ben, Chip y Hassan.
    ¡Un beso! Meri

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  4. Hola^^
    Es mi actual lectura y bueno, no está mal. Aprendes cosas gracias a Colin, pero entre que no me hace reír mucho y que noto que a la historia le falta algo....no pasa de ser un libro entretenido, y obviamente, con grandes frases dignas de John Green.
    besos!

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  5. Este es del que menos reseñas he leído, pero sigue pintando bien
    igual me fío de ti :)
    un beesito

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